Endesa redujo ayer la baja de sus previsiones de demanda eléctrica para los años 2016 y 2017, según el nuevo plan estratégico remitido hoy a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La eléctrica que preside Borja Prado prevé que el consumo de luz aumente un 1,8% el año que viene y un 1,7% en 2017, dos y una décima menos respectivamente que en sus "antiguas hipótesis". En cambio, el informe eleva en dos décimas el crecimiento estimado de la demanda para este año, que lo sitúa en un 2,9%, frente al 2,7% anterior.
La menor proyección del consumo eléctrico contrasta con la revisión al alza de la previsión del PIB que hace el grupo, que espera crecimientos del 2,5% en 2016 y del 2,1% en 2017. En cuanto al volumen de precios del mercado de generación eléctrica, la eléctrica confía en que se mantengan en torno a los 50 euros por megavatio hora (mwh) tras el brusco ascenso del 30% experimentado este año.
Las previsiones de Endesa también son positivas en torno a la sostenibilidad financiera del sistema eléctrico. El grupo prevé que, tras la reforma eléctrica, el sistema logre un superávit -los ingresos por el pago de facturas superan a los costes del sistema- que se irá incrementando desde los 650 millones de euros anuales, en 2014, hasta los 1.500 millones en 2017.
La eléctrica demanda que ese dinero vaya directo a reducir los cargos políticos de la factura y a reducir los impuestos que gravan con un tipo del 7% la generación de luz. "Esto supondría una reducción en la factura eléctrica y mejoraría la competitividad de la economía".
El objetivo de la eléctrica para el periodo 2015-2019 pasa por aumentar su presencia en el mercado gasista, elevando un 30% su número de clientes. Además, el grupo prevé recuperar su negocio internacional.
En
mi opinión esta noticia es buena siempre y cuando
repercuta en los consumidores y el recibo de la luz baje.
JAVIER BERNAD LOSCOS 1ºBSA
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